La eficiencia operativa de una empresa es un reflejo de las acciones que se ponen en práctica, en el día a día, con el objetivo de utilizar los recursos mínimos para entregar productos o servicios de calidad.
Sabemos que lograr este objetivo requiere tiempo y mucho trabajo, tanto de los gerentes como de los funcionarios. Además, es necesario monitorear las acciones para que se sepa si están logrando los objetivos propuestos.
Por lo tanto, preparamos esta publicación para ayudarte a lograr los resultados deseados. Aquí comprobarás qué es la eficiencia operativa, consejos para aumentarla y comprender qué indicadores debes observar. ¿Vamos?
Podrás leer en este artículo:
¿Qué es la eficiencia operativa?
La eficiencia operativa, para Michael Porter, es el conjunto de prácticas que se realizan en la empresa para que sus recursos se utilicen de la mejor manera posible.
De esta forma, los resultados pueden estar orientados tanto a reducir las fallas de productos y/o servicios, como a ofrecer mejores entregas, más rápidamente.
Controlar y gestionar la eficiencia operativa de la empresa es un desafío. Esto se debe a que no es solo un sector, un área o un equipo el responsable de la eficiencia operativa, sino la organización en su conjunto.
Así, mantener el engranaje en funcionamiento requiere la adecuada gestión de varios recursos: equipamientos, tiempo, procesos, personas e inversión financiera. Pero, ¿cómo observar todos los puntos según sus especificidades?
Para tener una visión general del funcionamiento de tu empresa, es importante analizar los indicadores de eficiencia y comprender las relaciones, impactos y contexto de cada uno. ¿Vamos a entender un poco más sobre estas métricas?
Indicadores que impactan la eficiencia operativa
Los datos deben ser el mejor amigo del gerente, ¿verdad? Sin embargo, en ocasiones, las exigencias excesivas no permiten detenerte a decidir qué indicadores merecen atención y cómo se analizarán.
Por ello, seleccionamos cuatro indicadores que ayudarán a medir la eficiencia operativa de tu empresa, considerando los recursos que ya hemos mencionado anteriormente: equipamientos, tiempo, procesos, personas e inversión financiera. ¿Vamos a ver?
Overall equipment effectiveness (OEE)
Este indicador muestra la eficiencia general del equipamiento. Para calcularlo se deben considerar tres aspectos:
- Disponibilidad: relación entre el tiempo producido y el tiempo programado para producir;
- Performance: relación entre producción real y producción teórica;
- Calidad: relación entre elementos según parámetros de calidad y ítems totales.
El producto de los tres elementos indica el grado de eficiencia de los equipamientos evaluados.
Return on investment (ROI)
El retorno de la inversión considera el capital disponible y el costo generado para realizar una determinada acción. En definitiva, este cálculo se puede realizar para evaluar la adquisición de nuevas tecnologías, la reorganización de procesos, la gestión del tiempo y la gestión de personas.
El valor del retorno sobre el costo inicial (financiero o no) de la inversión muestra si es factible mantener los esfuerzos en acción o si es necesario modificar la estrategia. Puedes ver si realmente valió la pena para tu negocio (en línea con tus objetivos, por supuesto).
Flujo de caja operativo (FCO)
Cuando hablamos de FCO, nos referimos específicamente al beneficio operativo. Entonces, en este caso, se consideran todos los insumos y productos, utilizando tres variables: utilidad antes de impuestos, devaluación e impuestos.
Por tanto, este indicador es muy importante para el control financiero de la empresa. Así, analizado con el ROI, la toma de decisiones de cuánto y dónde invertir se vuelve más asertiva.
Net Promoter Score (NPS)
El NPS es una medida de la lealtad y satisfacción del cliente con su producto o servicio. Así, al observar este indicador, es posible saber cómo es la experiencia que le brindas a tu consumidor.
De esta forma, al cruzar estos datos con los anteriores, se pueden identificar puntos de mejora en los procesos internos que impactan directamente en el público externo.
¿Cómo aumentar la eficiencia operativa?
Como ya hemos mencionado, no es responsabilidad de un área específica aumentar la eficiencia operativa. Para eso, se deben tomar varias acciones, de manera concurrente, con el fin de generar un impacto significativo en los resultados. Vea algunas acciones que se pueden realizar:
1. Invertir en estandarización de procesos
Al implementar la estandarización de procesos en tu operación, es posible reducir costos, ahorrar tiempo y minimizar errores. Con las pautas a seguir, es decir, los estándares, todo el equipo sigue las mismas pautas.
De hecho, esto aumenta la productividad del equipo, ya que existe una guía a seguir, que debe ser accesible para todos. De esta manera, los funcionarios no necesitan interrumpir las actividades para comprender lo que se debe hacer, ya que todos los pasos ya están predefinidos. Con esto, se optimiza la eficiencia operativa.
2. Gestionar inconvenientes
Cuando los procesos están estandarizados, es mucho más fácil identificar dónde están las fallas. Sin embargo, conviene recordar que el simple hecho de poder detectar inconvenientes no es suficiente para incrementar la eficiencia operativa. Para eso, es necesario tratarlos.
En este sentido, la creación y aplicación de planes de acción para resolver inconvenientes en los procesos es fundamental. Este tipo de práctica permite la mejora continua de procesos, además de la adición o eliminación de etapas en el camino.
3. Promover la alineación entre sectores
Cuando una organización está formada por muchos funcionarios, sabemos que es difícil mantener a todos en la misma página. Sin embargo, esta es una parte fundamental para lograr la eficiencia operativa.
Si bien la alineación es un tema que involucra aspectos culturales, es necesario trabajar en estrategias que muestren a los funcionarios la importancia de estas interacciones. Con un equipo alineado, las funciones y actividades están mejor definidas, lo que se traduce en más agilidad y productividad.
4. Alinear el control de calidad y la eficiencia operativa
Ofrecer un producto o servicio de calidad es una prioridad para que una empresa tenga éxito. Teniendo esto en cuenta, implementar procesos de verificación, auditoría y resolución de problemas es esencial para mantener una entrega de excelencia.
Por eso, es muy importante ser ágiles y abiertos a los feedbacks (internos y externos), como forma de mantener la mejora continua. Este tipo de actitud proporciona el crecimiento profesional y personal de los funcionarios y la madurez de la empresa en su conjunto. ¿Te gustó el contenido? ¿Sabías que Checklist Fácil contribuye a la eficiencia operativa de las empresas a través de software de estandarización, gestión y análisis de procesos? Solicita una demostración.
